Todo empezó cuando los anglos invadieron Gran Bretaña en el siglo V, procedentes de Angulus, una zona alrededor de la actual Dinamarca y el norte de Alemania. Los anglos dieron su nombre a Inglaterra y al inglés, sin embargo no pasó mucho tiempo antes de que se desarrollara la lengua escocesa. A lo largo de la Edad Media, el escocés se fue separando del inglés hasta convertirse en una lengua distinta.
El escocés se convirtió en la lengua dominante en Escocia. Las palabras y frases escocesas fueron utilizadas por nuestros reyes y reinas, en obras literarias y en registros oficiales.
Existen 4 dialectos principales, que agrupan 10 subdialectos que abarcan aproximadamente:
- Insular - Orcadas y Shetland
- Septentrional - Aberdeenshire, Highlands, Angus
- Central - Edimburgo, Glasgow, Stirling, Dundee, Fife, Perthshire, Dumfries & Galloway
- Sur: Scottish Borders
Gracias al impuesto electoral de 1690, podemos estimar que 750.000 personas hablaban escocés en aquella época, alrededor del 70% de la población. En la actualidad hay más personas que hablan escocés: en el censo de 2011 se identificaron 1,5 millones, que supone el 30% de la población.